Al final de la
1ª temporada tenía lugar la confrontación con Rabbit, en la que
Anna le metía dos tiros, pero su cuerpo desapareció así que no lo
dan por muerto. Al arranque de la temporada un pez gordo del FBI
llamado Racine se presenta en Banshee para esclarecer todo el lío de
Rabbit y el tiroteo, y al final dictamina que el FBI va a tenerlos a
todos vigilados y como Lucas Hood o alguno de sus agentes se salten
la más mínima ley en el desempeño de sus funciones caerán sobre
ellos con todo su peso. Pero Racine no es un agente cualquiera. Él
conoce a Rabbit desde hace años y lleva casi toda su carrera
obsesionado con atraparle, por eso no duda en presionar a Hood y a
Anna para obligarles a que le cuenten toda la verdad y le ayuden a
llegar hasta él.
A Anna le caen
30 días en un correccional de mujeres por lo del tiroteo y el plan
es pasar desapercibida hasta cumplir los 30 días, pero ya el primer
día se ve obligada a darle una paliza a otra reclusa que la estaba
molestando y la envían a aislamiento.
Gordon, el
marido de Anna, al descubrir por las malas la verdad sobre su esposa
se lleva a sus hijos de casa y no quiere saber nada de ella, y se
pasa las noches en clubs de streaptease poniéndose ciego,
desatendiendo a sus hijos.
El hijo del
verdadero Lucas Hood se presenta en Banshee; él sabe que el actual
sheriff es un impostor pero no ha venido a hacerle chantaje, solo
quiere su ayuda para desaparecer. Se metió en un lío con unos tipos
muy jodidos a los que robó uno montón de pasta, así que quiere que
“Lucas Hood” le fabrique una nueva identidad, tras lo cual no
volverá a saber de él, pero claro, esos tipos a los que jodió
acaban presentándose en Banshhe y el sheriff se ve obligado a
ocuparse de ellos.
Por su parte,
Kai Proctor está en guerra con los indios. Proctor estaba en buenos
términos con el anterior líder del Consejo, pero tras su muerte su
hijo, Alex Longshadow, se convirtió en el nuevo líder y éste no lo
traga, y después de que Proctor hiciera explotar el casino que
estaba construyendo, Alex ha intentado matarle en varias ocasiones.
Pero Alex no las tiene todas consigo en el Consejo. Uno de los
miembros considera que aún no está preparado para asumir el mando
de la tribu y pretende relegarlo para ponerse él al frente, por ello
Alex se ve obligado a recurrir a Proctor para que le ayude a hacerse
con el control del Consejo.
Y Hood trata de
reunir pruebas contra Proctor para meterlo entre rejas.
Esta temporada
es tan buena como la primera. Hay mucho sexo y hostias y tiros a
mansalva, es muy intensa y no contiene un solo momento de
aburrimiento, pero creo que lo de Rabbit lo alargan demasiado.
Aparece al principio y luego al final y entre medias ninguna noticia.
Creo yo que pudieron resolverlo mucho antes. Otra cosa que no me
gustó fue la última escena de Emmet, el poli negro. Creo que sobra,
no era necesaria.
Bueno, ahora la
3ª temporada.
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