“Daredevil”
es la adaptación televisiva del canal Netflix del conocido personaje
de la Marvel Comics que nos muestra los primeros pasos de Matt
Murdock como justiciero en la Cocina del Infierno.
Matt sufrió un
accidente con productos químicos de niño que lo dejó ciego pero
que agudizó el resto de sus sentidos, de forma que, pese a ser ciego
“ve” más que la gente normal. Puede saber si alguien le miente
escuchando los latidos de su corazón, saber lo que has desayunado o
si te duchaste hace dos días, percibe los cambios de presión en el
aire, etc. Toda esta información que le aportan sus sentidos le
permite saber dónde está cada cosa que le rodea y cuándo algo o
alguien se mueve cerca de él, así que técnicamente hablando de
ciego no tiene nada.
La serie se
sitúa en el mismo universo de los Vengadores y contiene algunas
referencias a la batalla de Nueva York de la primera película.
Empieza cuando ha tenido lugar el accidente y Matt está tirado en el
suelo con un montón de gente a su alrededor. Su padre aparece
corriendo y se agacha junto a él y desde su perspectiva vemos cómo
va perdiendo la vista hasta quedarse ciego. Luego la acción salta al
presente y conocemos al Matt Murdock adulto.
Matt y su amigo
Foggy Nelson acaban de dejar un prestigioso bufete en el que eran
becarios para montar el suyo propio en la Cocina del Infierno, ya que
Matt opinaba que eran unos cabrones desalmados y no le gustaba cómo
trataban a la gente. Recién acaban de abrir sus puertas y no tienen
ni dinero ni clientes, pero eso cambia cuando oyen hablar del caso de
Karen Paige, una mujer acusada de asesinar a un compañero de
trabajo, crimen del que afirma ser inocente. Y tras hablar con ella
Matt también lo cree, ya que al escuchar sus latidos sabe que dice
la verdad.
Karen era
secretaria de una empresa llamada Union Allied y encontró ciertas
discrepancias en las cuentas de su jefe. Se lo comentó y este le
quitó importancia, le dijo que era un pequeño error de nada y que
lo olvidara, pero luego ella lo habló con su compañero de trabajo,
el que acabó muerto en su piso. Lo invitó para hablar del asunto y
lo siguiente que recuerda es verlo muerto y ella con el cuchillo en
la mano. Está claro que alguien le ha tendido una trampa para
desprestigiarla, que se confirma cuando uno de los guardias de la
cárcel intenta asesinarla en su celda, algo que por suerte no
consigue, y gracias a esto Matt y Foggy logran dejarla en libertad.
Matt la hospeda en su piso para mantenerla a salvo, pero una noche
ella sale a escondidas para recuperar de su piso un USB con pruebas
incriminatorias contra Union Allied y sufre un nuevo intento de
asesinato. Afortunadamente Matt la ha seguido con su uniforme de
justiciero enmascarado y le salva la vida. Se encarga de su asesino y
lo deja amordazado en las puertas del periódico Bulletin y así toda
la historia sale a la luz y Karen queda exhonerada. Y en
agradecimiento por lo que han hecho por ella, Karen empieza a
trabajar de secretaria para Matt y Foggy, que buena falta les hace.
El mundo en llamas |
El abogado de
Union Allied presiona a Karen para que firme un documento de
confidencialidad según el cual se le prohibe desvelar cualquier
información relacionada con la empresa y si lo hace ellos no tomarán
medidas contra ella y dejarán las cosas como están, olvidando su
pequeña “desavenencia” con ella. Karen acaba firmando porque no
le queda más remedio, pero no es capaz de olvidar la muerte de su
compañero y acude al periodista Ben Urich, del Bulletin, el que
escribió el artículo sobre Union Allied, para que la ayude a
descubrir quién está detrás del asunto de Union Allied y
desenmascararlo, tarea nada sencilla y muy peligrosa.
Por su parte,
Matt también trata de averiguar quién es, porque no solo está
detrás de Union Allied sino que también controla a los distintas
bandas criminales que dominan la Cocina del Infierno (rusos, chinos y
japoneses) y también tiene a gran parte de la policía en el
bolsillo, una figura en la sombra que desea seguir permaneciendo en
el anonimato, tan temido entre sus hombres que ninguno se atreve a
decir su nombre, ya que todo aquel que lo nombra en voz alta acaba
muerto.
La serie es
completamente alucinante, la mejor adaptación que podía hacerse de
este personaje (mejor olvidar la película de Ben Affleck). Charlie
Cox está espléndido como Matt Murdock y Vincent Donofrio es el
mejor Wilson Fisk que podría existir. Ay, ¿dónde estaba cuando
hicieron la película? A los héroes los definen sus villanos y este
sin duda se lleva la palma. Vincent Donofrio es tan bueno que acabas
entendiendo el punto de vista de su personaje y por qué hace lo que
hace, e incluso sientes cierta lástima por él.
Las secuencias
de lucha son espectaculares; la pelea del pasillo del 1x02 ya es todo
un clásico de la serie y yo no me canso de verla. No hay un capítulo
en el que Matt no acabe hecho un zisco, lleno de moretones, cortes y
costillas rotas y parece un milagro que consiga levantarse por las
mañanas. Claro que es normal, el tío lleva solo una camiseta puesta
sin protección ninguna. De entrada esto es lo único que no me gustó
mucho al principio. En vez de llevar su traje oficial de Daredevil,
Matt leva una camiseta de manga larga negra y pantalón negro, y un
tapo cubriéndole la parte superior de la cara (el traje de Daredevil
no se lo pone hasta el último capítulo). La primera vez que lo vi
con este “uniforme negro” no me gustó, pero una vez que empiezas
a ver la serie y lo ves en acción acabas acostumbrándote.
En fin, ahora ya
de lleno con la 2ª temporada.
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