Un día fuí a la Casa del Libro a
comprar unos determinados libros y cuando me iba vi este libro por
pura casualidad y no pude evitar hacerme con él, porque jamás pensé
que llegaría a leerlo. Vi la película de Judy Garland de niño,
aunque apenas la recuerdo, y hace unos años hicieron una miniserie,
Tin man, que no me gustó nada, ya que la historia era muy diferente.
Pero estas no dejan de ser versiones adaptadas y en estos casos
siempre dejan cosas atrás, así que nada mejor que leer el libro
para conocer la historia completa.
Un ciclón arranca del suelo la casa de
tío Henry, con Dorothy y su perro Toto dentro. Cuando aterriza,
Dorothy se encuentra en un mundo nuevo, Oz, lleno de colores vivos y
gente muy extraña. La casa ha aplastado a la Malvada Bruja del Este
y todos lo celebran y le dan las gracias, pues los había esclavizado
durante mucho tiempo. Lo que Dorothy quiere es regresar a casa con
sus tíos, y la Bruja del Norte, que se encuentra allí, le dice que
siga el camino de baldosas amarillas que la conducirán a la Ciudad
Esmeralda, donde vive el Mago de Oz, un poderoso mago que podrá
enviarla de vuelta a su casa. Por el camino conoce al Espantapájaros,
al Hombre de Hojalata y al León Cobarde, que la acompañan a ver al
Mago de Oz, ya que ellos también quieren pedirle algo: un cerebro,
un corazón y valor, respectivamente. De camino a la Ciudad Esmeralda
viven varias aventuras y ya ante el Mago éste les dice que les
concederá sus deseos, pero antes deberán matar a la Bruja del
Oeste. Así que se dirigen al país de la bruja.
Siempre he dicho que los clásicos de
cada género hay que leerlos y “El Mago de Oz” es un libro
fundamental de la literatura infantil. Obviamente es muy sencillo de
leer, siendo para niños tiene que serlo, y sus poco más de 200
páginas se leen enseguida, sin apenas darte cuenta. El libro incluye
las ilustraciones de la 1ª edición, de 1900, y en general son
bastante buenos, pero Dorothy no me gusta, la representan demasiado
gorda.
Lo que más me gusta del libro es su
moraleja, algo habitual en este tipo de libros. El Espantapájaros,
el Hombre de Hojalata y el León Cobarde acuden al Mago para que les
dé un cerebro, un corazón y valor, pero en su misión contra la
Bruja del Oeste acaban descubriendo que aquello que querían lo han
conseguido por sí mismos, y esa es una buena lección para los
niños.
Mierda, ahora tengo ganas de ver la
película de nuevo. A ver si la encuentro.
Una joyita. Lo leí hace algunos años. Lo leía mientras salia a caminar.
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