Superman se dio a conocer al mundo durante la invasión alienígena liderada por Tyrell, que precisamente estaba en la Tierra para matar al último hijo de Krypton. Acabó con esa amenaza convirtiéndose en el salvador de la humanidad y muchos lo ven como un héroe, pero algunos no se fían de él, entre los que se encuentra la coronel Lee del Pentágono. Ella acepta que es un héroe y que los ha salvado a todos, pero alguien tan podersoso como Superman sería una terrible amenaza si se le fuera la cabeza, por eso contacta con los mejores científicos para buscar alguna forma de poder matarlo, solo por su acaso.
Mientras, Clark ha conseguido trabajo en el Daily Planet como reportero, y lo logró gracias a algo por lo que muchos habrían matado, una entrevista con Superman. Esto ha molestado a Lois Lane, pues quería ser ella quien lo entrevistara. Según Lois nadie importante concede una entrevista a un novato y esto le hace sospechar de Clark. Ella cree que el chico nuevo oculta algo, que alguien que se esfuerza por mantener un perfil bajo no es trigo limpio, así que decide investigarlo por su cuenta.
En lo personal, Clark se muda a un edificio en un barrio de mala muerte y conoce a su vecina, una chica despampanante y supersexy llamada Lisa, que enseguida le tira los trastos a Clark, y este no sabe muy bien cómo actuar con ella (Clark tiene muy presente los consejos que le dio su padre al respecto; alguien como él podría perder el control en un momento de exitación y hacerle daño a la otra persona).
Y por último tenemos al villano, Parásito.
Huyendo de la policía, el asesino en serie Raymond Maxwell Jensen acaba encerrado por accidente en una cámara de Laboratorios STAR, que se activa por error y su cuerpo es bombardeado por una oleada de neutrinos, que lo convierten en una criatura capaz de absorber la energía vital de las personas a las que toca. Jensen va dejando un reguero de cadáveres consumidos a su paso, incapaz de saciar su hambre. Entonces oye hablar de Superman en la televisión, el hombre más poderoso del mundo, y decide dirigirse a Metrópolis.
Este segundo volumen es una excelente continuación del primero. Es verdad que Parásito es más bien un villano de segunda, pero la versión que nos ofrece el autor se convierte en un auténtico quebradero de cabeza para Superman, que es tan vulnerable ante el toque de Parásito como cualquier otra persona, llegando a perder sus poderes temporalmente. Este segundo volumen también nos ofrece un cambio importante con respecto al canon oficial de Superman: Lois Lane no es aquí el interés amoroso de Clark, sino que ese rol lo desempeña la provocativa vecina de Clark. De hecho los dos casi no tienen relación aparte de ser compañeros de trabajo, y encuentro muy interesante que Lois sospeche de Clark y se ponga a investigarlo. Por cierto, que la mayor sorpresa ocurre en las últimas páginas, cuando el autor introduce en la historia a Lex Luthor, una versión del personaje muy diferente del villano megalomaníaco que todos conocemos. Será interesante ver por dónde tira el personaje.
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