“Hijos de Dune” es una miniserie de dos capítulos que adapta el segundo y el tercer libro de la saga de Frank Herbert, “El Mesías de Dune” e “Hijos de Dune”, un capítulo cada uno.
Los responsables de la miniserie de Dune hicieron ésta dos años después y yo tuve la suerte de que auí en España pusieran las dos seguidas, como si se tratase de una sola, y lo disfruté como un niño. Al igual que con la otra, ésta también la he visto tres veces; la primera por la tele, la segunda cuando me “hice” con ella y esta tercera hará cosa de dos semanas, en el puente de las Letras Gallegas. No sé por qué, pero esa semana me entraron unas ganas inmensas de volver a ver estas dos miniseries. No es ningún secreto que soy un superfan de la saga (y orgulloso que estoy de ello) y con las dos me lo pasé igual de bien que la primera vez (e igual de bien que con los libros). De hecho esta miniserie me la vi de un tirón y son tres horas, pero se me pasaron volando. Ay, ojalá adaptaran todos los libros...
Bueno, igual que pasó con la otra miniserie, esta es muy fiel a los libros y solo hay un par de cambios destacables, el más importante la edad de los hijos de Paul. En el libro tenían 9 años y aquí tienen 16. quizá por ser casi adultos ha habido algunos momentos en que me ha chocado un poco su grado de intimidad. Vale, Leto y Ghanima son mellizos y nacieron con la presciencia de su padre, más predominante en Leto, y por eso hay tanta complicidad entre ellos. Pero a veces esa complicidad es tan estrecha que resulta casi incestuosa. Por lo demás es tal y como recuerdo de los libros. Para acabar os digo lo mismo que con la otra miniserie, si queréis conocer mejor los libros, leeros las reseñas que hice en su día. O mejor, leeros los libros.
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