Buscar este blog

martes, 5 de julio de 2022

La guarida, de Shirley Jackson


"La guarida" es uno de los grandes clásicos del terror y la obra más conocida de Shirley Jackson. Hay una película de los años 60 bastante fiel pero que desconozco, otra muy conocida de 1999 que he visto infinidad de veces pero que es muy mala, mejor olvidarse de ella, y una versión televisiva bastante libre, "La maldición de Hill House", pero muy buena. Tenía muchas ganas de leer la novela, así que aquí está. 

El doctor Montague siempre ha estado interesado en las manifestaciones sobrenaturales y con no poco esfuerzo consigue alquilar durante unos meses Hill House, una lúgubre mansión construida hace 80 años con supuestos anteecedentes de apariciones fantasmales. Para el estudio de Hill House el doctor Montague necesita ayudantes y los escoge entre las personas que alguna vez se han relacionado con este tipo de fenómenos. Envía una docena de cartas pero solo dos personas se presentan en Hill House, Eleanor Vanee, una mujer tímida e insegura que de niña vivió un episodio de telekinesis (durante tres días llovió gravilla sobre su casa, pero ya no se acuerda) y una mujer llamada Theodora, una artista que posee capacidades de percepción extrasensorial. Además el doctor Montague se ve obligado a incluir en el grupo a un joven llamado Luke Sanderson, sobrino de la propietaria de Hill House, en representación de la familia. 

Al principio todos se llevan bien, bromean y se divierten mientras exploran Hill House y el doctor Montague va contándoles la historia de la casa, pero con el paso de los días al producirse ciertos sucesos inexplicables la tensión va apoderándose de ellos, y con la llegada de la esposa del doctor, espiritista aficionada, todo se precipita. 


Si esperas algún parecido del libro con alguna de las adaptaciones, con apariciones fantasmales explícitas o que Hugh Crane fue un monstruo que esclavizó niños, te quedarás decepcionado, como me pasó a mí. El terror que se maneja en el libro es a base de sugerir y se utiliza el ambiente opresivo de la mansión para potenciarlo. Hay momentos de golpes en las puertas en plena noche, y mensajes escritos en sangre en las paredes, pero no hay fantasmas que se muestren a las claras ni relación alguna de la casa con los antepasados de la protagonista. 

Eleanor no es un personaje que caiga bien. Es muy asustadiza e insegura y me recordó a la niñera de "Otra vuelta de tuerca". Es ambigua como ella, no sabes si lo que ve está ocurriendo de verdad o se le está yendo la cabeza. Y en el final tampoco hay un superclímax con aparición del fantasma malvado. Más bien al contrario. Es muy poco claro y necesitas más de una lectura para pillarle el punto. Me dejó un poco frío. De todas formas el libro me gustó. Está bien escrito y logra transmitirte la tensión y agobio de un lugar como Hill House.

No hay comentarios:

Publicar un comentario