El Clavo, el Amigo de la Muerte y la Mujer Alta, de Pedro Antonio de Alarcón

Pedro Antonio de Alarcón es un autor español de mediados del siglo XIX perteneciente al movimiento del Realismo. Fue periodista, político, soldado y miembro destacado de la Real Academia de la Lengua. Sus relatos pertenecen a muy diferentes géneros, desde la intriga hasta el clásico cuento gótico. En este libro de reúnen tres de sus relatos más conocidos: “El Clavo”, “El Amigo de la Muerte” y “La Mujer Alta”.

“El Clavo” pertenece al género de intriga. Un hombre llamado Felipe acude a visitar a un juez amigo suyo y lo encuentra bastante alicaído. Éste le cuenta que estando de vacaciones en Sevilla conoció a una mujer de la que se enamoró rápidamente, y ella de él. Acordaron casarse y él regresó adonde vivía para preparar su hogar para la llegada de ella, y regresó a Sevilla antes de la fecha prevista, pero de la mujer no había ni rastro. Creyéndose engañado regresó a la ciudad, incapaz de volver a confiar en ninguna mujer nunca más.

Paseando ambos por un cementerio encuentran una calavera con un clavo atravesándola de parte a parte, y el juez se decide a llevar ante la justicia al asesino.

Puede que en la época en que se publicó fuera el no va más, pero al leerlo ahora me parece muy previsible y casi desde el principio intuyes quién es el asesino. Únicamente al final guarda una pequeña y amarga sorpresa, pero eso no cambia mi opinión general sobre el relato, que es simplemente entretenido.

En “El Amigo de la Muerte”, un chico llamado Gil Gil, que vive prácticamente en la miseria, se enamora de Elena, de familia noble, y ante la imposibilidad de estar juntos decide suicidarse. Pero antes de que lo haga la Muerte aparece ante él ofreciéndole su amistad y mostrarle su oficio, prometiéndole ayudarle a que Elena y él acaben juntos.

El relato es bastante simpático, un tanto largo para lo que viene a decir, aunque entretenido, pero al final se vuelve demasiado surrealista y su desenlace no hay quien se lo crea.

Y por último “La Mujer Alta”, que es el clásico relato de fantasmas. Al protagonista se le aparece una mujer alta y mayor justo antes de que alguien cercano a él muera.

El relato es bastante bueno, pero es demasiado corto y no llega a ninguna conclusión, así que al final te quedas sin saber quién es la mujer alta. Es una pena porque prometía.