“Bosch” es
la adaptación televisiva de las novelas de Michael Connelly
protagonizadas por el inspector de Homicidios Harry Bosch. Yo soy un
gran fan de Connelly y en cuanto supe de su existencia no pude
esperar a que la doblaran y la vi en versión original. Y menos mal
porque recién ha terminado la 2ª temporada y la 1ª sigue sin
doblarse. Una lástima que ninguna cadena española se interese por
ella, porque es estupenda.
La temporada
está formada por 10 capítulos y adapta el libro “Ciudad de
huesos”, aunque también coge cosas de otros libros. La serie
empieza con el juicio a Harry Bosch por haber matado a un tipo que
perseguía, un sospechoso de violación y asesinato. Bosch tuvo que
dispararle porque sacó un arma pero según la fiscalía el
sospechoso no tenía ningún arma encima y Bosch lo mató y luego le
colocó el arma en las manos. Lo del juicio está sacado de “La
rubia de hormigón”.
En la trama
principal, la de “Ciudad de huesos”, un médico jubilado que
paseaba con su perro por un bosque cercano a su casa encuentra un
hueso humano correspondiente a un niño, con claros signos de haber
sido maltratado en repetidas ocasiones, y al examinar el lugar Bosch
encuentra más huesos. El caso le toca el punto sensible, ya que él
también tuvo una infancia difícil y no soporta que se les haga daño
a los niños, y se jura a sí mismo que dará con el asesino.
Luego, lo de
Raynard Waits, está sacado de “Echo Park”.
En los libros
Harry Bosch empezó con un compañero, Jerry Edgar, y luego pasó a
tener un segundo, Kizmin Rider. En la serie tiene a Edgar de
compañero (yo me lo imaginaba más mayor) aunque Kizmin también
aparece más adelante, pero no tiene la relevancia de los libros.
Otros personajes son su ex-mujer, Eleanor Wish, una ex-agente del FBI
experta en perfiles psicológicos que se gana la vida como jugadora
de poker profesional, y su hija Maddie, de 15 años. En “Ciudad de
huesos” Bosch no tenía ninguna hija; no es hasta el libro
siguiente, “Luz perdida”, que Harry descubre que tiene una hija
de 4 años. 15-16 años es la edad que Maddie tiene en los últimos
libros, y que en la serie tenga esa edad no me parece mal. Y por
último está Irving, el superior de Harry. En los libros los dos se
llevan fatal e Irving siempre está tratando de acabar con la carrera
de Harry. En la serie Irving es negro, algo que choca al principio,
pero en el fondo tanto da porque es igual de cabrón que en los
libros.
Sobra decir que
la serie me ha encantado. Yo soy de esos que prefieren las
adaptaciones fieles en cada detalle, pero en algunas ocasiones no me
importa que hagan pequeños cambios. En esta serie los hay pero me
parece bien, al fin y al cabo no adapta solo un libro sino que coge
cosas de tres, así que es comprensible.
Si soy sincero
nunca le había puesto rostro a Harry Bosch. En los libros tiene
bigote pero yo siempre lo había imaginado como Harry el Sucio con
canas, ya que ambos tienen el mismo carácter (policía de la vieja
escuela que no duda en saltarse las normas cuando la situación lo
requiere). Pero lo cierto es que Titus Welliver está genial y clava
el personaje.
En unos días
pienso ponerme con la 2ª temporada, que recién ha terminado estos
días.
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