Para empezar,
advertir que lo que pasa en este libro es consecuencia directa de lo
que ocurrió en el anterior, “Port Mortuary”, así que si no te
lo has leído echa el freno y hazlo para que no tengas que tragarte
spoilers.
¿Ya? Bien,
sigamos.
La doctora
Scarpetta se dirige a la prisión de mujeres de Savannah, Georgia, la
GPFW, para entrevistarse con Kathleen Lawler, la mujer que abusó de
Jack Fielding cuando tenía 12 años. Allí ella le pasa una nota con
el número de Jaime Berger para que se ponga en contacto con ella.
Scarpetta acude a su piso y se sorprende al encontrar allí a Marino,
al que suponía de vacaciones, pero en realidad ha estado trabajando
con Berger sin decirle nada, algo que la cabrea bastante.
Entre Marino y
Berger informan a Scarpetta sobre el motivo de que se encuentre allí
y por qué Jaime se puso en contacto con ella de esta forma tan
secreta.
Jaime cree que
el FBI ha pinchado el teléfono de Scarpetta, ya que la están
investigando por lo sucedido en su casa con Dawn Kincaid, la mujer
que intentó asesinarla. Dawn se encuentra en prisión, pero su
versión de los hechos es muy distinta a la contada por Scarpetta.
Según Dawn, fue a casa de la doctora a recuperar a su perro y ésta
se volvió loca e intentó matarla. El FBI la está investigando
porque no es la primera vez que se ve envuelta en algo así, y a
Scarpetta le cabrea porque su propio marido es del FBI y no le ha
dicho nada.
Jaime Berger
piensa reabrir el caso de Lola Daggette, una yonki con problemas de
agresividad que actualmente se encuentra en el pasillo de la muerte
por asesinar brutalmente en 2002 al doctor Jordan y a su familia. La
policía la encontró lavando su ropa manchada de sangre en la ducha,
pero ella siempre afirmó ser inocente. Jaime cree que el crimen pudo
cometerlo Dawn Kincaid en uno de sus primeros asesinatos y quiere que
Scarpetta la ayude a esclarecer el caso.
Además
Scarpetta tiene que vérselas con un asesino en serie que está
envenenando a algunas reclusas condenadas a muerte en la prisión de
mujeres de Savannah antes de su ejecución, y cree que está actuando
en connivencia con la alcaide de la prisión.
“Niebla roja”
fue galardonada con el V Premio RBA Internacional de Novela Negra,
pero la verdad es que no sé qué criterios siguen para elegir al
ganador. Que no se me entienda mal, me encanta que los autores que
leo reciban premios pero no sé por qué se lo dan a este libro y no
al anterior o al siguiente, porque a mí me parecen todos igual de
buenos (a veces parece que estos premios solo se los dan a escritores
famosos).
Sobre la novela
en sí decir que es muy buena. Lo que me pasa con los libros de
Scapetta es que al principio me cuesta un poco entrar en faena pero
una vez que van pasando las páginas te sumerges de lleno y ya no
puedes parar. La trama está muy bien construida y va complicándose
según avanza la novela y contiene algunos giros argumentales que te
dejan vuelto del revés. La identidad del asesino es la mayor
sorpresa de todas.
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