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lunes, 21 de noviembre de 2022

Latidos, de Franck Thilliez


"Latidos" es la cuarta novela protagonizada por Franck Sharko y Lucie Henebelle. 

Camille Thibault es una joven gendarme del norte de Francia que hace más de un año recibió un transplante de corazón. De un tiempo a esta parte tiene siempre la misma pesadilla: hay una joven de unos veinte años agachada en un lugar oscuro que le pide ayuda aterrorizada. Camille está convencida de que no es una simple pesadilla, sino un recuerdo de su donante, alguien a quien vio en algún momento de su vida, que le pidió ayuda y que le está transmitiendo a Camille a través de su corazón. 

Camille está obsesionada con descubrir la identidad de su donante y saber cómo era, si era una buena persona o no, y quién es la mujer de sus pesadillas, pero la ley de transplantes garantiza el anonimato de los donantes y por ese lado tiene las puertas cerradas. Cuando su cuerpo empiea a rechazar su  nuevo corazón, Camille sabe que en cualquier momento puede sufrir un infarto que sea letal para ella, así que se toma unos días libres en el trabajo para investigar por su cuenta la identidad de su donante. 

Mientras tanto, Sharko y Henebelle deben investigar la aparición de una mujer que ha estado viviendo en uno túneles subterráneos durante más de un año, razón por la que se ha quedado ciega. La mujer está catatónica y no responde a ninguna pregunta, y la investigación de ambos los lleva a descubrir el brutal asesinato de otras doce mujeres. Lo más curioso de todo es que una mujer policía parece llevarles siempre la delantera en todas las pistas que descubren... 


No sé cómo lo hace pero Franck Thilliez siempre se supera con cada libro. Sus novelas son muy oscuras y perturbadoras, que no tratan sobre las típicas muertes por disparo o apuñalamiento sino que nos presenta crímenes  bastante espeluznantes y difíciles de digerir, en plan experimentos con niños, muertes por hipotermia o inyectándole a alguien un elemento radiactivo y a ver qué pasa. La presente novela no se queda atrás. Aquí nos presenta a un grupo de asesinos que son unos auténticos carniceros, que hacen cosas terribles a sus víctimas, y esto conduce al lector hasta el tráfico ilegal de órganos humanos. Ya puedes hacerte una idea de lo que hacen estos tipos. 

Pero esto no es lo único. El libro también toca el tema de los niños robados durante el franquismo y las cosas horribles que les hacían a los discapacitados durante la dictadura argentina y que luego hacían desaparecer. Así que es un libro doblemente duro. 

La trama es muy turbia, no apta para estómagos sensibles, y está perfectamente hilada. Empieza como dos tramas distintas pero avanzada la novela se fusionan en una sola. Camille Thibault es un personaje nuevo en la saga pero es muy interesante y con una personalidad muy similar a la de Lucie Henebelle, una tía dura que no se detiene ante nada. 

La novela me ha parecido magnífica, una de las mejores del autor y estoy deseando leer ya la siguiente. 

9/10.

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