“El príncipe de la niebla” es la primera novela juvenil de Carlos Ruiz Zafón, publicada en 1993. la historia transcurre en 1943, en un pueblo a las orillas del Atlántico, al que la familia Carver se traslada para poder huir de la guerra. Su nuevo hogar está rodeado de misterio. El hijo de los antiguos propietarios, Jacob, murió ahogado en el mar, y su presencia se percibe en el ambiente cargado de la casa.
Max, de 13 años y su hermana Alicia, de 15, conocen y se hacen amigos de un chico de 17 años llamado Roland, nieto del farero. Los tres juntos investigarán el misterio en torno a Jacob y descubrirán la existencia de un siniestro personaje conocido como el Príncipe de la Niebla, que puede concederte cualquier deseo pero a un alto precio.
De las cuatro novelas juveniles de Zafón, durante mucho tiempo me faltó por leer “El palacio de la medianoche”, que hice por fin el año pasado, así que decidí que volvería a leerme las otras tres, para tenerlas todas reseñadas en el blog.
Aunque “El príncipe de la niebla” es la primera juvenil de Zafón no fue la primera que leí. La primera fue “Las luces de septiembre” y luego siguieron “El príncipe de la niebla”, “Marina” y “El palacio de la medianoche”. Aunque antes que ninguna de estas leí “La sombra del viento”, cuando el autor era todavía un desconocido para mí.
“El príncipe de la niebla” es una novela fantástica. Mezcla misterio, un poco de romance y terror, y sus 200 y pico páginas se leen en un santiamén (lo cierto es que me he leído estas tres novelas seguidas y con cada una eché dos días) y en el tramo final se produce una gran revelación. Sin duda una novela muy recomendable.
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