Por un puñado de besos, de Jordi Sierra i Fabra

Olga tiene 19 años y es seropositiva. Su novio, Darío, también se acostaba con otras mujeres sin ella saberlo. Se lo confesó, rompiéndole el corazón y rompiendo con ella, y más tarde la llamó para decirle que tenía sida y que se hiciera las pruebas cuanto antes. Por desgracia, Olga dio positivo. Pero está decidida a disfrutar de los años que le quedan de vida y pone un anuncio en el periódico, buscando un chico seropositivo con le que iniciar una amistad y tal vez algo más, según surja. 

Jaime es quien responde a su anuncio. Tiene 26 años y también tiene el corazón roto y se enamora de ella nada más verla. Ella parece sentir lo mismo, pero Jaime oculta un secreto que podría echar por tierra su bonita historia de amor. En realidad Jaime es periodista y está escribiendo un reportaje sobre el sida, por eso contactó con ella, pero ahora que se ha enamorado se siente mal por mentirle y tiene dudas sobre lo que está haciendo. 

Llegué a esta novela por pura casualidad. Buscaba información sobre el autor en la Wikipedia y entonces descubrí que habían hecho la película. Así que quise leerla (y también ver la película). 

La película nos la venden como una gran historia de amor llevada a la gran pantalla, pero la verdad es que eso es algo exagerado. Quitando el trasfondo del sida, que es un tema bastante duro, es la típica historia de amor. El chico sale con la chica por el reportaje, pero se enamora y le entran dudas de lo que está haciendo, pero antes de que pueda decirle la verdad ella lo descubre y se cabrea y no quiere volver a verlo, pero al final hay una carta de amor y acaban juntos, que es lo que suele pasar. Está bien, es entretenida, pero tampoco es para echar cohetes.