Algunos de estos problemas seguramente te resultarán familiares. Son de esos de adivinar la edad de dos personas, o de velocidad o de hallar en qué punto del camino se encuentran dos personas si van a tal o cual velocidad, o de hallar la hora, o que tienen en común unas determinadas palabras, y algunos, claro, tienen truco.
Este libro me resultaba curioso, pero he descubierto que soy un negado para los problemas de ingenio. Me avergüenza reconocerlo, pero como mucho habré acertado tres o cuatro de los 150. A pesar de que te da la solución, a veces no he entendido cómo llega a ella. Claro, te lo explica con palabras, pero habría resultado más fácil si desarrollara la fórmula que te lleva a esa solución (en muchos casos hay fracciones de por medio) o si incluyera un dibujo que te hiciera comprender mejor el enunciado. Vamos, un absoluto fracaso. Eh, pero tú puedes intentarlo si quieres, peor que yo no te va a salir.
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