“Abducidos” es una serie del 2002
producida por Steven Spielberg y formada por 10 capítulos de hora y
media cada uno (lo que equivale a una de 20 de 40 minutos cada uno,
vamos) que trata sobre abducciones extraterrestres a lo largo de 50
años relacionadas con tres familias, desde el OVNI estrellado en
Roswell en 1947 hasta el año 2001. Las tres familias protagonistas
son los Keys, los clarke y los Crawford.
Todo empieza con Russell Keys en 1944,
en plena Segunda Guerra Mundial. Russell es piloto de caza y él y su
escuadrón están en pleno ataque contra el enemigo sobre Alemania
cuando ven una luces brillantes que los rodean. Son tiroteados e
inmediatamente abducidos, curados y devueltos varios días después.
Russell vuelve a casa y trata de llevar una vida normal. Se busca un
empleo, se casa y tiene un hijo, pero tiene constantes pesadillas
sobre lo que les hicieron a él y sus compañeros que le atormentan.
Lo que recuerda en ellas es ver a unos médicos nazis experimentando
con ellos, introduciéndoles sondas y tal, pero al final acaba
recordando que en realidad eran alienígenas.
Russell descubre que los miembros de su
escuadrón han ido enfermando y muriendo, pero por alguna extraña
razón él es el único que queda con vida. Durante los años
siguientes sufrirá abducciones muy a menudo que lo dejarán bastante
tocado, y para proteger a su familia decide abandonarles y vivir como
un vagabundo, viajando de estado en estado para esconderse de los
alienígenas, pero no sirve de nada porque esté donde esté siempre
dan con él. Cuando su hijo Jesse alcanza la pubertad los
alienígenas dejan a Russell de lado y empiezan a llevárselo a él.
Tras años de abducciones, Jesse se da
cuenta de que es muy importante para los alienígenas, así que en
Vietnam no duda en arriesgar la vida en misiones suicidas porque sabe
que ellos le protegen. Pero su unidad no tiene tanta suerte y muchos
de sus compañeros mueren en combate. Esto lo deja bastante tocado y
al volver a casa cae en la droga. En una de sus idas de olla acaba en
el hospital y allí conoce a la que será su mujer, que es enfermera.
Gracias a ella consigue centrarse. Le cuenta lo de las abducciones
pero ella no acaba de creérselo, y juntos tienen un hijo, Charlie,
que como supndrás, al entrar en la pubertad empieza a ser abducido.
Ahora pasemos a los Clarke.
Uno de los aliens del OVNI de Roswell
sobrevivió al impacto y huyó antes de que llegaran los militares.
Malherido, llega hasta la granja de los Clarke adoptando un aspecto
humano. Al encontrarlo en su granero, Sally Clarke lo acoge hasta que
se recupere de sus heridas, aprovechando que su marido está fuera
por trabajo, y John, que así se hace llamar, se queda con ella dos
semanas, y surge el amor entre ellos. Acaban acostándose y cuando
aparecen los militares buscándole, John se marcha con los suyos.
Poco después Sally descubre que está embarazada y el resultado de
esta unión es Jacob.
Jacob es un chico raro. Es introvertido
y nunca expresa sus emociones; no llora, no se ríe ni se enfada.
Pero posee ciertas habilidades telepáticas y si te mira fijamente
puede mostrarte todos tus recuerdos de golpe, todas las cosas malas
que has hecho, todos tus miedos, y esto puede destrozarte la mente.
Owen Crawford, el malo de la historia,
es el militar a cargo de investigar lo de Roswell, un hombre estricto
y sin escrúpulos dispuesto a lo que sea para conseguir lo que
quiere. Estará obsesionado con el tema alienígena durante toda su
vida, tratando de hacerle ver al Presidente la grave amenaza que
suponen para la Tierra. Tratará de dar con John y al saber de la
existencia de Jacob seducirá a su madre para acercarse a él, pero
Jacob sabrá quién es y lo que pretende desde el primer momento, y
utilizará su poder destrozamentes para deshacerse de él.
Al saber que Owen en realidad está
casado y utilizó a su madre para acercarse a Jacob, Tom, su hermano
mayor, se dedicará en cuerpo y alma a destruír a Crawford y a su
familia. Y para proteger a Jacob de los que lo buscan, su familia
fingirá su muerte y lo enviarán fuera bajo una falsa identidad.
Jacob tendrá una hija llamada Lisa,
una chica totalmente normal, y cuando empiece a ser abducida los
alienígenas la juntarán con Charlie a bordo de la nave (algo que
ninguno recordará hasta que se conozcan fortuitamente), quedando
embarazada y dando a luz a Allie, que es el objetivo final del largo
experimento genético comenzado por los alienígenas hace 50 años,
el híbrido perfecto de alien y humano. Y al igual que Jacob, tanto
Lisa como Allie tendrán que darse a la fuga para huír de la
organización gubernamental que en su día dirigió Owen Crawford y
que ahora dirigen su hijo Eric, que es un poco cabrón pero no tanto
como su padre, y la hija de este, Mary, que es una auténtica hija de
puta, la digna heredera de su abuelo, que quieren capturar a Allie
para descubrir qué la hace tan especial.
Los Clarke: Charlie, Tom, Allie y Lisa |
Igual que a veces vuelvo a leer libros
que ya he leído solo para poder escribir la reseña para el blog,
con algunas series hago lo mismo. Vi esta serie hace algunos años y
me gustó mucho, y ahora quise volver a disfrutar de ella.
Si te gusta el tema de los alienígenas
esta serie es ideal para ti. A mí me gusta desde siempre, y que la
serie esté producida por Steven Spielberg hace que valga la pena
leerla. Para ser de hace casi 15 años los efectos son bastante
buenos y la historia es muy completa. Me encantan las historias que
abarcan varias generaciones, como en las novelas-río, y la de esta
serie está muy bien construída. No sé si leíste “Dune” de
Frank Herbert, pero a mí lo del experimento genético de los
alienígenas me recuerda mucho a lo del Kwisatz Haderach de la Bene
Gesserit.
Como he dicho es muy buena, pero mejora
mucho con la entrada en escena de Allie (Dakota Fanning), que es como
una especie de nuevo Mesías. Sus poderes van mucho más allá de los
de Jacob, pero además cuando habla todo el mundo le presta atención.
Pese a que solo es una niña, sus reflexiones son muy profundas y
llegan hasta lo más hondo de aquel que la escucha, incuído el
espectador. Hay que ver qué pedazo de actriz era Dakota Fanning
siendo tan pequeña. La única pega de la serie es el final, abierto
y algo triste. Claro que también es algo típico de Spielberg.
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