Y todo eso, de Rose Macaulay

"Y todo eso" es una novela de ciencia-ficción satírica publicada en 1918, reeditada en 1919 y que luego desapareció en el limbo de los libros olvidados. Justo un siglo después esta editorial lo rescató del olvido; yo no la conocía de nada pero mi bibliotecario me la recomendó porque sabe que leo mucha ciencia-ficción y siempre me está recomendando libros de este género. 

Unos años después de la 1ª Guerra Mundial y para evitar que algo así vuelva a ocurrir, el Ministerio de Cerebros clasifica a los ciudadanos en distintas categorías según su nivel de inteligencia y establece un rígido sistema de autorizaciones para casarse y tener hijos. 

Solo los considerados inteligentes pueden casarse entre sí y tener hijos. Está prohibido que un inteligente se case con un tonto, o que lo hagan dos tontos, y es ilegal que tengan hijos, ya que serían tontos. Si igualmente los tienen, dependiendo del caso, tendrán que pagar una cuantiosa multa o incluso ir a la cárcel. Estas nuevas medidas no sientan nada bien en la población y se producen situaciones como la que viven la funcionaria del Ministerio Kitty Grammont y el ministro e ideólogo del sistema Nocholas Chester. Ambos pertenecen a categorías distintas, pero aún así deciden seguir con su relación en secreto. Cuando finalmente acabe saliendo a la luz, supondrá todo un escándalo y será recibido con ira por la población. 

 

Mi bibliotecario suele acertar siempre con sus recomendaciones, pero esta vez no ha sido así. Siento decirlo pero la novela no ha llegado a engancharme en ningún momento. El planteamiento de la novela me ha parecido interesante, pero no ha pasado de ahí. La mayor parte del tiempo los personajes están socializando y es de mucho hablar y ya. Yo me esperaba algo al estilo de "1984" de Orwell o "Un mundo feliz" de Aldous Huxley, pero nada que ver, y algunos momentos se me hacía cuesta arriba. Acabé algo decepcionado, la verdad. Y tampoco veo que tenga nada que ver con la ciencia-ficción. Es una crítica a las clases sociales y ya. 

Es curioso e interesante y ahí se queda todo.