Dos historias para no dormir, de Stephen King

Este librito de Stephen King incluye dos viejos relatos suyos, “Nona” y “La balsa”, que hasta la publicación de este libro no podíamos leer en español. Estos dos relatos estaban incluídos en la versión americana de la antología “Skeleton Crew”, que aquí en España se dividió en tres tomos: “Historias fantásticas”, “La niebla” y “La expedición” (algo que no entiendo, en total serán unas 600 páginas o 700, no es tan gordo como para dividirlo en tres partes, a no ser que quisieran sacarle a uno las perras). Lo que no sé es por qué no se incluyeron en la versión española, total solo son 120 páginas más, y eso con letra grande.


Ahora seguramente estará disponible en las librerías, la verdad es que no me he fijado, pero cuando salió hace 10 años solo lo había en edición no venal, es decir, que no lo había a la venta, solo lo podías conseguir si te lo regalaban al comprar varios libros, y en eso tuve bastante suerte, me lo ofrecieron a elegir entre dos o tres y no lo dudé un instante.
El de “La balsa” es el más conocido de los dos por haber sido adaptado en aquella película tan mítica del género, “Creepshow”, seguro que como buen fan de King la habrás visto más de una vez y más de dos. Cuatro amigos deciden ir a bañarse a un lago, el cual tiene una balsa de madera en medio. Pero eso no es lo único que hay en el lago, pues los chicos descubren una extraña de mancha de petróleo cerca de la balsa. Una mancha que está hambrienta. En el de “Nona”, un chico conoce a una misteriosa chica en la cafetería de una gasolinera y juntos deciden ir en coche hasta el pueblo de Castle Rock. Pero cada vez que está a su lado, el chico se vuelve salvajemente violento.
Los relatos son muy buenos, una muestra de cómo era King en los 80, un King puramente escritor de terror. Ambos relatos me gustaron por igual. La mancha de petróleo es aterradora y lo que puede hacer te revuelve el estómago y la influencia que ejerce Nona sobre el protagonista te cautiva como a él, aunque el final me pareció un poco raro. Pero si tengo que elegir me quedo con este relato de todas formas.