Plaga, de Michael Grant

"Plaga" es la cuarta entrega de la saga Olvidados. En los anteriores, entre un libro y otro pasaban varios meses. en este no lo dicen pero parece que transcurren solo unos días desde el final de "Mentiras".

Por si no fuera suficiente la escasez de alimentos, la ausencia de electricidad, los conflictos entre chicos con poderes y normales, los bichos mutantes, el regreso del psicópata de Drake y la gayáfaga en lo más profundo de la mina,ahora los supervivientes de Perdido Beach se están quedando sin agua. El agua la extraen de un pequeño lago y su nivel está descendiendo más rápido de lo que creían y dentro de poco ya no habrá. Así que Albert, el principal empresario del pueblo (él fue quien acuñó su propio dinero y quien ideó un sistema de trueque) le pide a Sam que forme un pequeño grupo y viaje al norte. A unos 25 kilómetros hay un gran lago y Albert quiere que compruebe si es potable. El motivo de que se lo pida a Sam es que el lago se encuentra en territorio de los coyotes (unos coyotes que hablan y están al servicio de la gayáfaga) y Sam es uno de los "raros" más poderosos de Perdido Beach (puede emitir rayos de calor con las manos).

Paralelamente surge una epidemia similar a la gripe que afecta a muchos de los chicos. Empieza con fiebre y tos pero luego la tos empeora drásticamente. Toses tan fuerte que te desplazas varios metros, acabas escupiendo trozos de pulmón y al final te mueres. Además hay un nuevo tipo de insecto que si te muerde pone sus larvas en el interior de tu cuerpo, y estas al emerger se te comen por dentro. Estos insectos pueden crecer hasta alcanzar el metro y parecen ser inmunes a los poderes de Sam (Sam y su grupo tienen la desgracia de toparse con un grupo de ellos en su camino hacia el lago).

El psicópata de Drake, al que tenían encerrado y encadenado, se ha escapado y ha ido a reunirse con la gayáfaga para recibir sus órdenes. Los insectos se convierten en su ejército y él los envía contra los chicos del pueblo, para que los maten a todos. Mientras, él va en busca de Petey, un niño autista, el hermano de Astrid. Petey es el más poderoso de todos los chicos con poderes de Perdido Beach, aunque hay pocos que lo sepan. Puede manipular la realidad y crear cosas de la nada (él fue quien creó la ERA), y la gayáfaga lo necesita para poder liberarse. Y ante la ausencia de Sam, Edilio, el alcalde, se ve obligado a pedirle ayuda a Caine para que los ayude a luchar contra los insectos.

Otra gran entrega de esta serie. Aquí ocurren muchas cosas interesantes. Una enfermedad letal, la amenaza de quedarse sin agua, insectos mutantes imparables... y el resurgir de Caine. Ésta es una de las cosas que más me han gustado del libro. En los últimos libros Caine no pintaba mucho y parecía que el autor no supiera qué hacer con él, pero aquí vuelve a convertirse en un personaje fundamental. El desenlace es sorprendente e imprevisible, y deja las cosas más que interesantes, en sus distintos frentes, para el quinto libro.