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lunes, 8 de octubre de 2018

Los ladrones de cuerpos, de Jack Finney

"Los ladrones de cuerpos" es uno de los grandes clásicos de la ciencia-ficción. Escrito por JAck Finney en 1955 ha sido adaptado en cuatro ocasiones: "Los ladrones de cuerpos" en 1956, en blanco y negro; "La invasión de los ultracuerpos" en 1978, la de Donald Sutherland; "Secuestradores de cuerpos" en 1993, de Abel Ferrara, ambientada en una base militar e "Invasión" en 2007, la de Nicole Kidman.
De adolescente recuerdo haber visto la de 1978 (terrorífica la última escena de la película) y la de Abel Ferrara, y al leer el libro quise ver la película original, la de 1956 (pese a los medios de la época me pareció bastante buena) y también la de 1978.

Este es uno de los libros de los que Stephen King habla en su ensayo sobre el terror, "Danza macabra",  y como me propuse leer algunos de los libros mencionados en él, pues aquí está.
La historia ya la conoces de sobra, las vainas del espacio de las que surgen copias de los habitantes del pueblo, que se desarrollan mientras estos duermen y cuando alcanzan su culminación los originales se desintegran, idénticos en todo, aspecto, recuerdos, personalidad, y la única diferencia es su ausencia de emociones.
Todo esto ocurre en el pequeño pueblo de Santa Mira, al norte de California, y solo un pequeño grupo de personas se da cuenta de lo que está pasando; el doctor Miles Bennell, Beckym una antigua novia de juventud del doctor, y sus amigos los Belicec, que llaman a Miles en plena noche cuando encuentran en un armario de su casa un cuerpo humano no del todo formado.


Confieso que cuando empecé a leerlo no me di cuenta de que se trataba de la hsitoria clásica de los ultracuerpos. Pensaba que la historia de las vainas y la de las réplicas humanas sin emociones eran dos historias diferentes, pero al avanzar un poco ya caí en la cuenta.
La novela me ha gustado mucho, como no podía ser de otra manera, al tratarse de uno de los grandes clásicos de la ciencia-ficción. Son menos de 250 páginas y se lee fácilmente, y me encanta toda la paranoia y catastrofismo de la historia. ¿Cómo probar que tu madre no es tu madre cuando todo indica que lo es, sin que parezca que te has vuelto loco? ¿Cómo impedir que las vainas asimilen a todos los habitantes del pueblo, si tarde o temprano tendrán que irse a dormir? ¿Cómo derrotarlas si están en todas partes? Es una historia fantástica, pero lo más curioso es que el final es muy diferente del de las películas. No entraré en spoilers pero si has visto alguna de las adaptaciones (menos la de "Invasión", que cambian las vainas por un virus alienígena, y yo eso no lo considero una adaptación de la novela) ya sabrás cómo acaba la historia. Sin embargo el del libro es diametralmente opuesto, y es lo que menos me gusta de la novela, parece muy apresurado, como si el autor se lo hubiera sacado de la manga en el último momento. Personalmente prefiero el final de las películas. Esto no quita que sea una novela muy recomendable.

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