Ben y Sheere son dos heramanos que fueron separados al nacer para protegerlos de un siniestro personaje llamado Jawahal, que mató a su padre, destruyó la obra de su vida y juró acabar con toda su descendencia. Sheere se cría con su abuela, Aryami Bosé, mientras que Ben se cría en un orfanato. Al cumplir los 16 años Ben deberá abandonar el orfanato y pocos días antes conoce a su hermana, de la que no sabía nada. Aryami Bosé les habla de su padre y de la tragedia que destrozó a su familia y les advierte del grave peligro que corren, pues Jawahal ha esperado 16 años para culminar su venganza e irá a por ellos en cuanto Ben abandone el orfanato. Aryami es ya demasiado mayor para enfrentarse a él, así que deberán ser ellos los que se hagan cargo. Por fortuna no estarán solos en esta peligrosa aventura, pues contarán cono la ayuda de la Chowbar Society, un club secreto formado por Ben y otros seis huérfanos del orfanato, que han jurado prestarse ayuda unos a otros si alguno la necesita.
Y por fin la última de las cuatro novelas juveniles de Carlos Ruiz Zafón que me faltaba por leer. En la biblioteca siempre han tenido las otras tres (Marina, Las luces de septiembre y El príncipe de la Niebla) y yo las leí hace como un millón de años (creo que empecé por “La sombra del viento” y luego seguí con “Las luces de septiembre”, “El príncipe de la Niebla” y “Marina” en último lugar). Ya pensaba que me iba a quedar sin leer este libro, pero resulta que la biblioteca lo tiene desde hace unos meses, así que aquí está.
La verdad es que me esperaba algo en plan las mil y una noches pero me ha sorprendido para bien. La historia tiene parte misterio y parte género fantástico y algún que otro giro sorpresa, y se lee fácilmente.
Igual me vuelvo a leer las otras tres.
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