La Unión Soviética se
enfrenta a la mayor crisis alimentaria de su historia. Gran parte de
su trigo se ha echado a perder y en menos de un año la población
empezará a morirse de hambre. La única solución es comprar el
excedente de trigo de otro país. Estados Unidos se ofrece a
venderles su excedente de trigo, 55 millones de toneladas, pero a
cambio quiere ciertas concesiones en armamento nuclear. Empiezan así
unas complicadas y tensas negociaciones para llegar a un acuerdo
entre ambas potencias. Pero lo que está en juego aquí es más que
el alimento para el pueblo soviético. Si las negociaciones fracasan
la facción dura del Politburó tomará el control y declararán la
guerra a Europa, invadiendo cada uno de sus países.
Paralelamente
unos extremistas ucranianos planean asesinar al director de la KGB.
Su objetivo, provocar una revolución que obligue al Gobierno
soviético a conceder la independencia a Ucrania.
Esta
novela me ha gustado más que la anterior que leí del autor, “El
negociador”. Esa era algo lenta al principio mientras te explicaba
el contexto de la historia, pero “La alternativa del diablo”
tiene un ritmo distinto, que engancha desde las primeras páginas.
La
trama recuerda mucho al tipo de libros que solía escribir Tom
Clancy, aunque a FF se le da mejor enganchar al lector. Hay intriga
política, espionaje, un poco de romance y terrorismo. La trama de
los ucranianos puede parecer que no pinta mucho, pero en las
doscientas y pico últimas páginas da un giro espectacular y
totalmente inesperado, pasando a convertirse en la trama principal y
llegando a poner en jaque a las dos superpotencias. Es un libro
francamente recomendable y uno de los mejores del autor.
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