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lunes, 22 de mayo de 2017

The Following. 3ª temporada (¡Ojo Spoilers!)

Esta 3ª temporada tiene lugar un año después de la 2ª. Joe va a ser ejecutado en un mes y Ryan no tiene pensado acudir porque considera a Joe un asunto zanjado, algo que forma parte de su pasado y en lo que no quiere pensar siquiera. Pero Ryan sueña muy a menudo con él, que son amigos, que beben juntos y que Joe le enseña a matar, y aunque no quiera admitirlo esto empieza a afectarle.
Mark Gray, el gemelo superviviente, se ha juntado con otros asesinos y pone en marcha su venganza contra Ryan por matar a su madre y a su hermano, recreando sus asesinatos y dejando el mensaje “Ryan Hardy miente” en el escenario del crimen, porque Mike asesinó a su madre a sangre fría y el FBI lo encubrió. Mark seguirá matando hasta que digan la verdad.
Jeff Clarke, amigo y superior de Ryan, fue quien autorizó la operación contra la madre de Mark. Mark y los suyos lo secuestran y le sacan una confesión que graban en video y hacen pública. Ryan da una rueda de prensa, desmintiéndolo, lo que cabrea a Mark, que toma represalias llevando a cabo una masacre en un cuartel de bomberos.

Kyle y Daisy, la pareja de asesinos que trabajan con Mark, trabajan también con otra persona sin que éste lo sepa, alguien que les da todos los recursos que necesitan para llevar a cabo los asesinatos. Esta persona resulta ser Strauss, el mentor de Joe, otro psicópata al que van a juzgar por secuestrar e intentar asesinar a una periodista y al propio Ryan, que busca socabar la credibilidad del FBI frente al jurado de su juicio. Strauss sale libre finalmente y se escapa y Ryan va a ver a Joe para que le ayude a dar con él.
En el 3x06 entra en escena el mejor estudiante de Strauss, su primer pupilo, Theo Noble, que pasa a ser el villano principal para el resto de la temporada. Theo es una fantasma, un asesino frío y letal del que no existe el más mínimo rastro. Strauss le pide ayuda para escapar y Theo lo mata por obligarle a salir a la luz. Y Ryan acude una vez más a Joe para que le cuente todo lo que sepa acerca del pupilo de Strauss.

En el día de su ejecución (3x10), Joe se amotina en la enfermería de la cárcel y toma varios rehenes y amenaza con matarlos si Ryan no va a verle. Ryan le confiesa a regañadientes los sueños que tiene con él y después de eso Joe libera a los rehenes y se entrega, pues ha visto en Ryan a su mejor y más fiel seguidor y no le importa morir porque vivirá en Ryan para siempre. El resto de los capítulos se centran en la caza de Theo y en la organización de Aliza, una oreganización secreta que se dedica a encubrir a asesinos en serie ricos y millonarios, a la que acude Theo para librarse de Ryan.


Resulta irónico que esta última temporada de “The Following” haya sido la que más me ha gustado. La serie tenía sus cosas buenas y sus cosas malas pero yo si empiezo a ver una serie lo hago hasta el final, aunque se les vaya de las manos. En la 1ª temporada, tras la fuga de Joe, la serie caía en picado y en la 2ª no me gustó nada que Joe se convirtiera en un líder religioso, con lo que molaba Edgar Allan Poe, y en esta 3ª temporada estaba claro que el personaje ya no daba para más. Primero se escaba de la cárcel, luego finge su muerte y al final lo capturan y de vuelta a la cárcel, si aquí volviera a escaparse habría sido un cachondeo. Joe Carroll ya estaba exprimido al máximo y no cabía otro final para él que el que se produce en esta temporada. Aunque Joe aún se guarda un as en la manga y el 3x10 es sin duda el mejor capítulo de la temporada. Me encanta que, pese a todo por lo que han pasado, Ryan acabe reconociendo que él y Joe son amigos e incluso acaba salvándole la vida. Lo que me ha parecido una gran cagada es el final de la serie, que más abierto no podía ser. Como final de temporada sería perfecto pero como final de serie es una gran decepción, todo un chasco, como suele suceder en estos casos.
Bueno, se acabó lo que se daba, ahora a otra cosa.

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