Como miembro no oficial de su tribu nativa americana, Daunis Fontaine nunca ha acabado de encajar. Sueña con dejar su pasado atrás y estudiar medicina, pero las circunstancias la llevan a tomarse un año para cuidar de su frágil madre en la reserva ojibwe. Allí conoce a Jamie, pero es un chico que oculta algo...
Y entonces Daunis presencia un asesinato y descubre que una droga letal amenaza a su comunidad. Ella confía en que sus conocimientos de química y medicina tradicional la ayuden a dar con el responsable, pero la búsqueda de la verdad es cruel: Daunis deberá aprender qué significa ser una mujer ojibwe fuerte y hasta donde es capaz de arriesgar para proteger a su gente.
Este libro ha sido toda una sorpresa. No lo conocía de nada y acabé leyéndolo porque me atrajo la portada, me pareció muy artística y original. Y luego la sinopsis me pareció muy interesante. Me ha gustado mucho. No había leído ningún libro ambientado en una reserva india y en ese aspecto ha sido muy original, te da mucha información sobre su cultura y costumbres.
Sobre la historia, la protagonista presencia un asesinato y hay un tema de tráfico de meta en la reserva. Unos agentes del FBI están infiltrados investigando el asunto y la protagonista se ve envuelta en la investigación. Esto me ha gustado, me recordó mucho a Breaking Bad. En el tramo final me tuvo muy enganchada, hay mucha acción y revelaciones potentes. Sin duda ha sido mi libro revelación del año, todo un descubrimiento.
