Comparada con la impresionante 5ª
temporada, la 6ª resultó un tanto floja, aunque la trama
de Eva y el Purgatorio moló bastante. Esta 7ª temporada
es aún más floja si cabe. La 6ª tenía 3 o 4
tramas. Esta tiene 2, la de los Leviatanes y lo de las alucinaciones
de Sam, y por medio hay un montón de capítulos que no
tienen nada que ver, capítulos independientes de esos de
pillar al monstruo de turno, o de fantasmas o capítulos flojos
que tienen más humor que otra cosa, que no aportan nada. Pero
tampoco es que sea tan mala. Capítulos malos habrá unoa
4 o 5, la mayoría son bastante normalitos, y los primeros y
últimos son bastante buenos.
Bueno, a lo qu vamos. Al final de la 6ª
temporada, Castiel absorbe todas las almas del Purgatorio para tener
el poder suficiente para destruir a Rafael. Luego de hacerlo decide
quedarse con las almas, se proclama como el nuevo Dios y les dice a
los Winchestes y a Bobby que le rindan pleitesía o los matará.
La 7ª temporada arranca un momento
después. Bobby, genial como siempre, se arrodilla y le suelta
“¿te vale así o quieres que toque el suelo con la
frente?”, y cuando los Winchester van a imitarlo Cas les dice que
lo dejen, que no quiere que lo hagan por miedo, sino porque crean en
él, y entonces se va y empieza a “arreglar las cosas”:
mata a los ángeles que se pusieron de parte de Rafael, se
presenta en una iglesia y mata al predicador que estaba usando su
nombre en vano, se aparece en la sede de campaña de un
político y masacra a todo su equipo... Pero algo no va bien.
Cas alberga demasiado poder y está empezando a perder el
control y su recipiente se está deteriorando.
Lo que pasa es que Castiel no solo
absorvió las almas del Purgatorio, sino también a los
Leviatanes, las primeras criaturas hechas por Dios, unos seres tan
terribles y destructores que Dios creó el Purgatorio para
mantenerlos allí encerrados. Ellos son los que están
tomando el control de Cas, y si no devuelve todas las almas al
Purgatorio antes de que sea tarde, su recipiente explotará y
los Leviatanes vagarán libremente por el mundo.
Antes de que Muerte pueda matar a Cas,
éste la libera y luego desaparece. Muerte advierte a Dean de
que se encarguen de Cas antes de que reviente y les ayuda creando un
eclipse para que puedan llevar a cabo el ritual del Purgatorio.
Después de eso se lava las manos y amenaza a Dean con
destrozarlo si vuelve a intentar atarla, y se va.
Cas aparece a última hora para
que le quiten todas esas almas y las envíen de vuelta al
Purgatorio, se ha dado cuenta de que lo que le dijo la Muerte es
verdad. Hacen el ritual y vuelve a ser el que era, pero resulta que
los Leviatanes no se han ido, se han agarrado muy adentro y toman
posesión del recipiente de Castiel. Este se sumerge en lago,
explota y los Leviatanes se dispersan, poseyendo a varias personas.
Sam, Dean y Bobby no tardan en llegar a
la conclusión de que están bien jodidos, porque ninguna
de las armas habituales les hace el ás mínimo daño.
Poseen una fuerza descomunal y encima pueden cambiar de aspecto, y en
su primer encuentro Dean acaba con la pierna rota. Y como el jefe de
los Leviatanes ha puesto precio a sus cabezas, porque saben que están
ahí, tienen que pasar a la clandestinidad. Más adelante
descubren que conrtándoles la cabeza pueden frenarlos por
bastante tiempo y que el jabón industrial es como ácido
para ellos debido a uno de sus elementos, el bórax, y puede
hacerles mucho daño.
El jefe de los Leviatanes es Dick Roman
(o como dice Bobby, el puto Dick Roman), uno de los 50 hombres más
poderosos del mundo, un tipo que tiene un montón de empresas y
que siempre está saliendo en los medios. El plan de Dicj es
convertir a todos los humanos del planeta en el alimento de los
Leviatanes, y uno de sus chicos ha creado un aditivo que ha puesto en
las hamburguesas que convierte a los que las comena en ganado manso.
A lo largo de la temporada Sam y Dean tratan de desbaratar los planes
de Dick y de hallar la forma de matarlo (el bórax le hace
cosquillas) ya que creen que si él muere, los demás
Leviatanes lo harán con él.
 |
| El puto Dick Roman; qué cara de cabrón |
Leviatanes aparte, el otro problema es
la mente destrozada de Sam. Como Castiel le quitó el muro que
le impedía recordar lo del Infierno, ahora Sam empieza a tener
alucinaciones con Lucifer, que le dice que en realidad aún
sigue en la Jaula, que todo eso de los Leviatanes es producto de su
imaginación. ¿Qué mejor forma de tortura que
hacerle creer que es libre? Y Sam, poco a poco, empieza a dudar de
qué es real y qué no, pero Dean consigue centrarlo y
que recupere la cordura, aunque Sam tiene que seguir soportando la
irritante presencia de Lucifer.
Sam está un poco ido en los
primeros capítulos, pero luego está como si nada
durante buena parte de la temporada. Hasta el 7x17, que se la va la
pinza por completo. Ve y escucha a Lucifer todo el tiempo y esto le
impide dormir diez minutos seguidosy su salud se resiente y acaba
ingresando en un psiquiátrico. Dean trata de hacer algo para
ayudarle y oye hablar de un sanador llamado Emanuel, y Dean va a
verle. Y resulta que el sanador no es otro que... ¡Castiel! Sí,
pequeño, Castiel no murió, pero no recuerda quién
es ni nada de lo que hizo, y Dean opta por no mencionárselo.
Cas accede a ayudar a su hermano y por el camino aparecen alguos
demonios, que van a por Cas, y son salvados por Meg, que decide
acompañarlos porque Crowley la quiere muerta, y siempre viene
bien tener un ángel a mano.
Al llegar al psiquiátrico
resulta que hay un montón de demonios custodiándolo y
Dean le confiesa a Cas que ya le conoce, le dice que es un ángel
y le cuenta todo lo que hizo, y que puede acabar con esos demonios.
Cas lo hace y con cada demonio que mata va recordando fragmentos de
su pasado, hasta que al final recupera toda la memoria y se siente
fatal por todo lo que hizo y tal.
Desgraciadamente no puede hacer nada
por Sam, no queda nada del muro, así que hace lo único
que se le ocurre:trasladar el problema de Sam a su propia mente. Y se
queda en el psiquiátrico, medio catatónico, bajo la
vigilancia de Meg.
Dick está haciendo excavaciones
por todo el mundo, buscando algo, y cuando por fin lo encuentra, Sam
y Dean se lo roban. Se trata de una tablilla de barro con la Palabra
de Dios y en el momento en que rompen el sello, Castiel despierta de
su catatonia y un joven llamado Kevin se convierte en el Profeta, el
único capaz de leer la tablilla. Lo que pone en la tablilla
son las instrucciones de Dios para matar a los Leviatanes, en caso de
consiguieran salir del Purgatorio: ungir el hueso de un hombre justo
con la sangre de un ángel caído, del Rey del Infierno y
de un Alfa.
Cas, que ya está cuerdo, se ha
hecho pacifista y no quiere saber nada de peleas, Leviatanes ni malos
rollos, y si alguien se pone a discutir delante suya, desaparece. Cas
no sabe qué es lo que hará a partir de ahora, pero va a
tomárselo con calma, y entonces se despide de Dean y
desaparece. Y en el último capítulo Sam y Dean
consiguen reunir todos los ingredientes para matar a Dick y se
disponen a llevar a cabo su misión, aunque tendrán que
afrontar varias complicaciones por el camino.
Los primeros caítulos son
bastante buenos. El 7x01 y el 7x02 van sobre los Leviatanes, el 7x03
sobre una chica-monstruo a la que Sam perdonó la vida cuando
era un chaval y en el 7x04 sale el dios Osiris. A partir de aquí
hay un montón de capítulos bastante flojos, o tontos o
del montón. El 7x05 es de los peores, va sobre brujos y lo
único que mola es que salen James Marsters y Charisma
Carpenter, Spike y Cordelia de Buffy. El 7x08 es bastante gracioso.
Sale Becky, aquella fan de los libros de Sobrenatural que estaba
enamorada de Sam. Utiliza un filtro de amor para que Sam se case con
ella y Dean es el único al que esto le huele raro. Además
en este capítulo conocemos a Garth, un cazador bastante
pringao con el que te partes. El 7x09 parece un capítulo tonto
más, diablo de Jersey y hamburguesas, pero al final ocurre
algo que te deja muy tocado. El 7x10 es un capítulo muy
emotivo que continúa esa final y en los últimos
capítulos hay un epílogo a ese final, bastante
sorprendente, que se cierra definitivamente en el último
capítulo. Un buen final para un gran personaje. ¡Te
echaremos de menos!
El 7x12 es de los buenos. Sam y Dean se
enfrentan al dios Cronos. Dean acaba accidentalmente en 1944 y allí
conoce a Elliot Ness, que también es cazador, y juntos van
tras Cronos. Luego hay más capítulos del montón
y en los últimos la cosa vuelve a remontar. El 7x17 es de los
mejores de la temporada, el del regreso de Castiel, así como
el 7x21, el de la Palabra de Dios y el Profeta, que es alucinante. Y
el último capítulo es un final de temporada genial y
tiene un cierre inesperado y superguay. Ahora a ver si la 8ª
temporada es mejor, y por lo que sé, parece que sí.
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