Pues esta temporada va
sobre brujas. Todo empieza cuando una chica llamada Zoey tiene
relaciones sexuales por primera vez con su novio, pero entonces éste
empieza a sangrar abundantemente por todos sus orificios hasta morir
desangrado. Oficialmente la causa es un aneurisma pero su madre le
revela la verdad, que es una bruja. Ella no lo es porque se saltó
una generación, pero su abuela sí lo fue y para protegerla la envía
a una escuela de brujas que hay en Nueva Orleáns. Esta escuela no
tiene nada que ver con Hogwarts, es más bien como una mansión del
siglo XIX típica del Sur, y en ella solo hay otras tres estudiantes:
una joven obesa llamada Winnie que es un muñeco de vudú viviente
(si se clava un tenedor, por ejemplo, la herida aparece en la persona
en que está pensando), Nan, una jove con Síndrome de Down que es
clarividente y Madison, una chica algo creída ya que es una actriz
famosa y que es telekinética.
En el primer capítulo
Zoey conoce a un chico que le gusta, Kyle, que muere en un accidente
de autobús (ejem) junto a sus compañeros de universidad. Como ayudó
a Madison en un asunto delicado, ésta le devuelve el favor
ayudándola a resucitarle, pero en el accidente mortal las víctimas
han quedado todas desmembradas, así que montan un cuerpo nuevo para
Kyle. Al resucitar Kyle se comporta como un animal salvaje, sin
raciocinio, y Zoey se ve obligada a encadenarle.
Sarah Paulson encarna a
Cordelia, la directora de la escuela, que le cuenta a Zoey la
historia de ésta y de su fundadora y le habla de la Suprema, la
líder del clan, una bruja mucho más poderosa que una bruja normal y
que solo hay una en cada generación.
La Suprema actual se
llama Fiona y como no podía ser de otra forma está interpretada por
Jessica Lange. Fiona es además la madre de Cordelia y ambas se
llevan fatal porque Fiona siempre la ha machacado y despreciado
durante toda su vida. En el primer capítulo Fiona se presenta en la
escuela sin avisar con la intención de hacerse cargo de la formación
de las chicas, pues cree que su hija está haciendo un trabajo de
pena, aunque su verdadero motivo es uno muy diferente.
Fiona tiene cáncer y
se está muriendo, pero cree que se debe a que ya ha surgido una
nueva Suprema (la nueva Suprema obtiene sus poderes de la energía
vital de la anterior Suprema, cual relación parásita) y cree que es
una de las chicas, así que piensa descubrir cuál es y matarla.
Kathy Bates encarna a
una condesa del siglo XIX, Madame Delphine LaLaurie, que torturaba y
asesinaba a sus esclavos negros y los desangraba para hacerse una
crema para la cara que le rejuveneciera la piel. Entonces una mujer
llamada Mary Labeau (Angela Bassett) le ofrece un elixir que la hará
inmortal, pero resulta que uno de los esclavos torturados por Madame
Delphine era la pareja de Mary, y tras darle el elixir la encierra en
un atáud y la entierra durante 180 años, hasta que es encontrada
por Fiona. Mary es una bruja inmortal y enemiga del clan de Fiona
desde entonces y lleva décadas manteniendo una tregua con él. Fiona
acude a Mary para que le dé el elixir, a cambio del cual le
entregará Madame Delphine, pero Mary le dedica todo su desprecio y
vuelve a retomar las hostilidades contra el clan de Fiona.
Veo las series de
seguido una vez la temporada ha llegado a su fin, pero voy leyendo
los comentarios de amigos que las van siguiendo semanalmente. Eso
hice con esta 3ª temporada de AHS y todos los comentarios que leí
decían que era bastante floja, por no decir la peor de la serie, así
que no me esperaba gran cosa, pero lo cierto es que me ha parecido
bastante entretenida. Una vez más Jessica Lange está increíble y
es la mejor de esta temporada, y lo de que cada bruja tenga un poder
diferente, como los mutantes, también mola. Pero también hay cosas
que no aportan nada, como la trama del Frankenstein, que es ridícula,
y otras son un poco surrealistas, como que Fiona y Mary pasen de
matarse la una a la otra a unirse contra los cazadores de brujas, así
por las buenas, y tan amigas. Lo peor de todo es que no sé qué hace
alguien como Kathy Bates en una serie de este tipo, es como si bajara
el listón, aunque su personaje mola bastante y recuerda mucho a
Annie Wilkes. Lo que no me gustó mucho fue su final y el de Mary
Labeau. Eso sí, esta temporada de terror tiene poco.
En fin, ahora a esperar
por la 4ª temporada.
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